Vivo en unión libre, ¿tengo derechos?
El que una pareja viva en unión libre no significa que no se tengan derechos. Incluso el nombre jurídicamente aplicable a este tipo de relaciones es el de concubinato.
Concubinato se refiere a la unión entre dos personas “quienes tienen derechos y obligaciones recíprocos, siempre que, sin impedimentos legales para contraer matrimonio, hayan vivido en común de forma constante y permanente por el periodo mínimo que establezca la legislación del estado de que se trate. Sin embargo, no será necesario el transcurso de ese periodo de tiempo cuando reunidos los otros requisitos, la pareja tenga un hijo o una hija en común”[1].
Hay concubinatos del mismo género y los derechos a los que se tienen acceso son: alimentarios, sucesorios, presunción de paternidad, patrimoniales, de seguridad social, protección contra violencia familiar, de adopción y muchos más.
Puede tramitarse una constancia o carta de concubinato ante el Registro Civil de la localidad correspondiente, y para ésta se tiene que declarar bajo protesta de decir verdad que viven juntas las personas interesadas; que no han contraído matrimonio fuera de la relación concubinal; cuánto tiempo llevan viviendo juntas; su domicilio; nombre y edad de los hijos o las hijas que hubiera; motivo por el cual se tramita el acta, además de llevar dos testigos para concluir el trámite.
Lo que no
es el concubinato es una opción jurídica para tener más de una pareja de forma
legal y aun así obtener derechos y beneficios matrimoniales “así que, si alguno
de los dos no es soltero, los derechos y las obligaciones de esta unión se
reducen a cero, pues el concubinato sólo existe entre quienes no están
casados”.
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