Un modelo nutricional muy sano, cercano y accesible es el que se presenta en la ya cada vez más denominada Dieta de la milpa. Es posible que todas las personas en México estemos, o hayamos estado, muy familiarizadas con este tipo de dieta.

A últimas fechas las personas especializadas en nutrición, y sobre todo en alimentación sana para las personas adultas mayores, recomiendan consumir menos productos artificiales, suplementos alimenticios, alimentos procesados, y evitar las azúcares, grasas, calorías y sodio, y simplemente hacer una dieta que en conciencia incluya todos los colores.

De acuerdo con el sitio oficial del gobierno, dedicado a esta dieta, se le llama así a[1]:

“[…] la alimentación de origen mesoamericano que tiene como centro nutritivo-cultural los productos de la milpa (maíz, frijol, chile y calabaza), más los demás alimentos de origen mesoamericano que se consumen en México, con aquellos adoptados por la cocina tradicional mexicana de origen externo, combinados de forma saludable […]”.

Seguramente reconocerá en platillos muy mexicanos este tipo de dieta: frijoles, tortillas recién hechas, flor de calabaza, calabacitas, salsas de chile, jitomates, frutas.

Todos esos productos tienen los nutrientes que requerimos: vitaminas, calcio, proteínas, fibras. Estas son las ventajas de consumir la Dieta de la milpa[2]:

“[…] Los alimentos con proteína vegetal aportan fibra soluble e insoluble que inhibe la absorción de colesterol, disminuyendo el riesgo de enfermedades cardiovasculares. También favorece el balance ácido alcalino debido a que la proteína vegetal tiene mayor aporte de calcio y magnesio, por lo tanto, valores más adecuados del potencial renal ácido; aporta menos grasas; favorece el estado de antioxidación o de balance oxidativo, y tiene un efecto antitóxico. La dieta de la milpa favorece la eliminación de toxinas a través de su aporte de sustancias que favorecen la menor formación de sustancias tóxicas en los metabolismos y la optimización en la eliminación de estas sustancias […]”.

 

NOTA IMPORTANTE: Recuerde que, si bien APRENDER A ENVEJECER aporta información de fuentes confiables, siempre recomendamos que consulte primero a su médica o médico de cabecera, y que evite automedicarse.

 

 

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[1] https://www.gob.mx/salud/acciones-y-programas/la-dieta-de-la-milpa-298617
[2] Idem.

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