Es común que las y los psicoanalistas, cuando sus pacientes comentan o relatan que sienten malestares en el estómago, sugieran que se atienda de inmediato y de lleno al problema, porque conocen las repercusiones negativas que tiene el persistente dolor de estómago o los problemas digestivos en las emociones y en el estado de ánimo.
De manera espontánea, instintiva, las personas y sociedades enteras relacionan las emociones con el consumo alimenticio y, especialmente, con el buen o mal funcionamiento del intestino.
Por ejemplo, está el dicho de “barriga llena corazón contento” y también, “las penas con pan son menos”. También ocurre que cuando tenemos mucha tristeza, el hambre desaparece, o al contrario, se incrementa de manera extraordinaria. Cuando hay alegría, se come y se digiere mejor.
La medicina contemporánea ha puesto énfasis en el vínculo entre una flora intestinal saludable y un estado emocional sano, porque[1]:
…El microbioma intestinal está formado por un conjunto de bacterias y microorganismos fundamental para el buen funcionamiento del organismo. Hasta hace poco existía un gran desconocimiento al respecto; de hecho, se conocía como flora intestinal y no se hacía mucha referencia al tema. Pero desde hace dos décadas los estudios acerca de la importancia de estos microorganismos confirman que son muy importantes, poniendo sobre la mesa su relación con problemas digestivos, neurológicos y psiquiátricos…
Asimismo, hay quien dice que:
…los probióticos y psicobióticos, estos últimos, microorganismos que, ingeridos en cantidades adecuadas, producen un beneficio en la salud mental […] pueden ayudar en la regulación y normalización microbiana. Varias investigaciones han demostrado que bacterias como los lactobacilos o las bifidobacterias ofrecen beneficios en personas con depresión. Y hasta la Organización Mundial de la Salud recomienda, desde el año 2005, el uso complementario de los probióticos para el tratamiento de la depresión[2].
NOTA IMPORTANTE: Recuerde que, si bien APRENDER A ENVEJECER aporta información de fuentes confiables, siempre recomendamos que consulte primero a su médica o médico de cabecera, y que evite automedicarse.
Contacto:
Ana Luisa Desales Iturbe
Gastroenteróloga y Endoscopista
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[1] https://www.lavanguardia.com/vivo/psicologia/20220222/8073322/ansiedad-depresion-microbioma-intestinal-nbs.html
[2] http://www.rethinkdepression.es/microbiota-intestinal-sana-clave-en-depresion/#:~:text=Como%20aseguran%20los%20especialistas%20en,alterada%20en%20quienes%20padecen%20depresi%C3%B3n.
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