Los ejercicios abdominales son los que se realizan con “los músculos que se encuentran en el abdomen, los cuales cumplen tres funciones: sirven de apoyo al tronco superior, permiten el movimiento de éste y hacen que los órganos internos se mantengan dentro de la cavidad abdominal”[1].
Es recomendable hacer abdominales porque si tenemos estos músculos fuertes, se reduce el dolor de espalda (sobre todo la media y la baja); se mejora la postura; se previenen lesiones; se mejora el equilibrio y la estabilidad; se respira mejor; se logra un mejor rendimiento deportivo; se trabaja con la fuerza funcional, y los órganos de la zona están más protegidos ante cualquier percance[2].
Casi todas las personas sabemos hacer abdominales sentados sobre el suelo; sin embargo, los abdominales también se pueden hacer mientras estamos sentados. Para esto se deben utilizar las piernas, se levantan y se gira para un lado en lo que se levantan de nuevo, y se gira para el otro lado. Recordemos respirar, inhalar, exhalar, y también calentar antes del ejercicio, así como enfriar cuando terminemos.
Otro método para hacer un abdominal mientras se está sentado es:
Sentada en la orilla de la silla, la espalda recta, abdomen contraído y las piernas juntas, abre y cierra las piernas, manteniendo el abdomen duro. Puedes dejar tus manos en la cintura o aprovechar para hacer algún ejercicio de brazo, como recomienda el canal de YouTube Siéntete Bien[3].
NOTA IMPORTANTE: Recuerde que, si bien APRENDER A ENVEJECER aporta información de fuentes confiables, siempre recomendamos que consulte primero a su médica o médico de cabecera, y que evite automedicarse.
[1] https://www.misentrenamientosdefutbol.com/diccionario/abdominales
[2] https://psicologiaymente.com/deporte/beneficios-hacer-abdominales
[3] https://www.salud180.com/nutricion-y-ejercicio/abdominales-en-silla-elimina-la-pancita-y-marca-tu-abdomen-con-esta-rutina
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