Hay quienes consideran que la mitad de la activación física necesaria para la buena salud se resume en mantener una buena postura durante todo el día, incluida la noche.
Lo anterior quizá suena exagerado, pero basta con hacer un experimento en caso de sentir malestares en articulaciones, espalda, cuello, piernas o cadera, para ver que el cuerpo agradece estar en una postura que no lo incomode.
Algunos de los ejercicios elementales para mantener un porte saludable consisten en lo siguiente[1]:
- Ponerse de pie con la espalda recta, sin tensiones.
- Mantener los hombros atrás.
- Activar suavemente los abdominales.
- Distribuir el peso del cuerpo en todo el pie.
- Movilizar el cuello con suavidad hacia los lados y hacia el pecho, evitando movimientos de rotación brusca.
- Dejar caer los brazos a los lados, moviendo los hombros hacia arriba, luego adelante y atrás.
- Realizar estiramientos suaves de músculos en los brazos y piernas.
La buena postura puede incluso mejorar[2] con tan sólo estar atentos a cómo nos sentamos, acostamos o caminamos; mantenernos activas o activos; con un peso saludable; utilizando zapatos sin tacón, y asegurándonos de que cuando estemos trabajando no forcemos la espalda, el cuello, los brazos, etcétera.
En caso de que estemos durante mucho tiempo del día sentadas o sentados, es necesario hacer pausas frecuentes para levantarnos, caminar y rectificar nuestra postura, asegurarnos de que ambos pies toquen el piso, y evitar a toda costa cruzar las piernas[3].
NOTA IMPORTANTE: Recuerde que, si bien APRENDER A ENVEJECER aporta información de fuentes confiables, siempre recomendamos que consulte primero a su médica o médico de cabecera, y que evite automedicarse.
[1] https://www.med.una.py/index.php/hospital-hc/noticias-del-hospital/2112-ejercicios-para-activar-el-cuerpo-y-mantener-una-buena-postura
[2] https://medlineplus.gov/spanish/guidetogoodposture.html
[3] Ibid.
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