Al utilizar todo el tiempo nuestras manos, es muy importante mantenerlas fuertes, sanas y flexibles. Las muñecas suelen ser una parte de la mano que no trabajamos al hacer ejercicio, sin embargo, mantenerlas en forma puede reducir las posibilidades de lesiones, fracturas o lastimaduras más severas.
Por lo pronto, con toda conciencia intente probar qué tan flexibles están sus muñecas. Vea hasta dónde las puede doblar hacia abajo, hacia arriba y qué tanto se pueden mover, de tal manera que, en algún punto, sin forzarlas, sentirá un poco de estiramiento.
Esa sensación es la que paulatinamente se ejercitará durante la práctica para fortalecerlas, flexibilizarlas. Uno de los ejercicios básicos que se pueden intentar es[1]:
Sentarse frente a una pared de manera que usted pueda estirar los brazos sin inclinar el cuerpo manteniendo los codos ligeramente flexionados. Mantener las palmas de las manos planas con los dedos bien extendidos, comenzar despacio a hacer fuerza contra la pared (hasta donde se pueda), y concentrarse en los dedos. Se dará cuenta de que si pierde contacto en un punto (un dedo, el talón de la mano), su espalda se desestabiliza. Lo recomendable es empezar poco a poco hasta poder permanecer unos 2 minutos, sintiendo el apoyo firme de los dedos.
También es recomendable, sin cargar mucho peso y sin provocar dolor, tomar algunos objetos y jugarlos con las muñecas, así como hacer círculos hacia adentro y hacia afuera como rutina diaria.
NOTA IMPORTANTE: Recuerde que, si bien APRENDER A ENVEJECER aporta información de fuentes confiables, siempre recomendamos que consulte primero a su médica o médico de cabecera, y que evite automedicarse.
[1] https://www.sabervivirtv.com/medicina-general/ejercicio-dolor-manos-munecas_750
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