La clave para bajar de peso haciendo ejercicio está en lograr colocar una rutina cotidiana (las veces que sean recomendables a la semana, por lo menos cuatro) que pueda ir aumentándose paulatinamente en ritmo y en tiempo, y mediante la cual, sin llegar al exceso y mucho menos a lastimarse, la persona pueda sentirse algo cansada o incluso acabar sudando.
Los ejercicios que inciden en la disminución de peso corporal casi siempre son cardiovasculares, y es muy común que se agite un poco el ritmo cardiaco, por lo que hay que estar muy pendientes de no exagerar. Trotar, caminar, nadar, andar en bici, bailar y hacer algo de aeróbicos son sugerencias ideales para bajar de peso.
En cuanto a los ejercicios que tonifican el cuerpo, esos también abonan bajar de peso, e igualmente deben de hacerse bajo la supervisión estricta de su fisioterapeuta de cabecera.
Lo más importante de todas estas rutinas es que se hagan con gusto, de manera divertida, sin riesgos para la salud, hidratándose lo suficiente y con una dieta que acompañe el desgaste. Además, lo mejor es que cada persona adopte el ejercicio que mejor vaya con su biografía, condición física, estado de salud.
Es decir, dependiendo de lo que las y los doctores le recomienden, usted puede escoger el ejercicio ideal e irlo incorporando a su vida. Casi no puede errar si elige caminar o bailar. Esto, insistimos, en la medida de sus posibilidades.
Si bien APRENDER A ENVEJECER aporta información de fuentes confiables, siempre recomendamos que consulte primero a su médica o médico de cabecera, y que evite automedicarse.
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