Después de una exitosa protesta titulada “Soy viejo, no idiota”, convocada por Carlos San Juan de Laorden contra el maltrato y las arbitrariedades que los bancos cometían contra las personas mayores en España, los banco han reaccionado. A través de organizaciones como Asociación Española de Banca, CECA y la Unión de Cooperativas de Crédito, se ha propuesto un decálogo para atender y mejorar sus servicios a la población sénior y las personas con capacidades diferentes. 

Destaco algunos puntos: 

1.- La atención presencial será de 9 a 14 horas, en ventanilla o cajero. 

2.- Trato preferente a los mayores en sucursales, con preferencia en casos de alta afluencia.

3. Garantía de adaptabilidad, accesibilidad y sencillez de los canales en función de su uso, poniendo a disposición de estos clientes versiones con lenguaje y vista simplificados.

4.- Ofrecimiento a los clientes de acciones de educación financiera, digital y prevención de fraudes por el canal que resulte más adecuado.

5. Formación específica obligatoria al personal de la red comercial en las necesidades de este colectivo. 

¿Qué se le ocurre que tenemos que aprender de la experiencia española? ¿Qué tendríamos que pedir para nuestro país?  Las personas adultas mayores tenemos derechos, y uno de ellos es el derecho a la organización. Usted decide.

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