Muchas personas anhelan durante años que llegue el momento en el que puedan retirarse o jubilarse del trabajo. Es comprensible cuando se ha laborado de manera exhaustiva y debido a eso se han cancelado las posibilidades de hacer otras cosas, que puedan ser más afines a lo que esa persona desea. Sin embargo, es muy común que se padezca el síndrome del retiro, con algo de depresión, falta de estímulos, tristeza, añoranza.

Unas de las recomendaciones más prácticas para cuando toque el turno de jubilarse o retirarse son muy obvias, pero no nos damos el tiempo para planearlas.

Lo primero que puede hacerse, es saber que el tiempo de jubilación no es un momento de agotamiento físico y mental en el que la persona ya no sirve para la vida; al contrario, quizá vienen los momentos más satisfactorios y disfrutables. Siendo así, hay que hacer una lista de todas aquellas actividades que se le han antojado a lo largo de la vida y que ha pospuesto o no hecho por falta de tiempo y recursos. Vale la pena seleccionar lo que considera más factible y empezar a buscar opciones accesibles a su estilo de vida y recursos para llevarlas a cabo sin falta. Por ejemplo, si toda la vida ha querido aprender a bailar flamenco, quizá hay que detectar (preguntar por) las escuelas o lugares cercanos en donde se enseñe baile a precios accesibles para usted, y comenzar a ver tutoriales en video para aprender ese baile. La jubilación es un momento de estreno y entusiasmo: ¡vale la pena planearla y vivirla a plenitud!

 

Contacto:

Elena Paz Morales

Docente en la Escuela Nacional de Entrenadores Deportivos

Pág. web pensiones IMSS: imss.gob.mx/pensiones

Pág. web PENSIONISSSTE: gob.mx/pensionissste

Pág. web Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro: gob.mx/consar

Pág. web Servicios turísticos ISSSTE: gob.mx/turissste

Pág. web Centros vacacionales IMSS: centrosvacacionales.imss.gob.mx

 

NOTA IMPORTANTE: Recuerde que, si bien APRENDER A ENVEJECER aporta información de fuentes confiables, siempre recomendamos que consulte primero a su médica o médico de cabecera, y que evite automedicarse.

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