Cuando avanza la edad, es normal que en algunas personas se comiencen a perder y ralentizar algunas facultades: la velocidad con la que se transmitían mensajes vía el sistema nervioso o neurológico no es la misma con la edad. No obstante, la demencia y el Alzheimer no son naturales, pues son enfermedades que responden a otro tipo de padecimiento, no al paso normal de los años.

En este sentido, la memoria, los pensamientos y la seguridad con las que nos manejamos cotidianamente pueden verse afectados si nuestro estado neurológico no es tan saludable ni eficiente como antes.

Esto ocurre con nuestro sistema nervioso[1], el cual controla “movimientos, sentidos,  pensamientos y recuerdos”:

…A medida que se envejece, el cerebro y el sistema nervioso pasan por cambios naturales. El cerebro y la médula espinal pierden peso y neuronas (atrofia). Las neuronas pueden comenzar a transmitir mensajes más lentamente. Los productos de desecho u otros productos químicos se pueden acumular en el tejido cerebral a medida que las neuronas se descomponen, lo cual puede causar que se formen cambios anormales llamados placas y ovillos neurofibrilares. Un pigmento graso de color marrón (lipofuscina) también se puede acumular en el tejido nervioso.

La descomposición de los nervios puede afectar los sentidos, por lo que se podría presentar reducción o pérdida de los reflejos y/o la sensibilidad, lo cual lleva a problemas del movimiento y la seguridad.

La reducción de la capacidad de pensamiento, de memoria y cognitiva, es una parte normal del envejecimiento. Sin embargo, estos cambios no son iguales en todas las personas, y no siempre afectan la capacidad de pensar.

Algunas presentan muchos cambios en los nervios y en el tejido cerebral, y otras tienen pocos cambios.

Para evitar el deterioro de nuestro sistema nervioso o estado neurológico, es importante hacer ejercicio físico diariamente, tener una alimentación sana no saturada en grasas ni azúcares, socializar, hacer ejercicios mentales como jugar, leer, aprender y resolver problemas, así como viajar y bajar la cantidad de estrés, en la medida de lo posible[2].

NOTA IMPORTANTE: Recuerde que, si bien APRENDER A ENVEJECER aporta información de fuentes confiables, siempre recomendamos que consulte primero a su médica o médico de cabecera, y que evite automedicarse.


[1] https://medlineplus.gov/spanish/ency/article/004023.htm#:~:text=A%20medida%20que%20usted%20envejece,lentamente%20que%20en%20el%20pasado.

[2] Ibid.

Comments are closed.