Algunas de las recomendaciones clave para cuidar la salud en épocas invernales, de mucho frío, nos fueron enseñadas por nuestras madres y padres durante las infancias. Parecen de sentido común, pero difícilmente la gente se cuida de manera eficaz, de tal manera que evite en su totalidad las enfermedades respiratorias y contagiosas tan comunes en la época. Vale la pena recordar algunas de esas sugerencias de antes, así como otras que han sido muy repetidas en la actualidad, sobre todo después de la pandemia por Covid-19.
Por lo pronto, recordamos las primeras recomendaciones: No salir de casa sin varias capas de ropa para que, en caso de que se tenga calor, se pueda quitar algo de ropa sin tenerse que quedar con lo mínimo y así evitamos el enfriamiento; no olvidar tapar el cuello y el pecho, si se puede con bufanda; al entrar a un sitio con clima caliente, quitar ropa y, antes de salir, volverse a cubrir para evitar fuertes ráfagas de aire.
Vacunarnos contra la Influenza y Covid si tenemos la aprobación de alguna persona médica de cabecera y tomar todo tipo de vitamina C que se encuentra en frutas como guayabas, tejocotes, naranjas, limones, limas y mandarinas; también hay que reforzar las precauciones respecto de entradas y salidas de lugares calientes a fríos o viceversa; esto es, extremar los cuidados para no exponernos a cambios bruscos de temperatura.
Evitar el consumo de alcohol o fumar en exceso y hacer ejercicio solamente en los lugares en los que no hay mucha contaminación y en horarios en los que no ha bajado demasiado la temperatura, también son sugerencias útiles para esta temporada[1].
NOTA IMPORTANTE: Recuerde que, si bien APRENDER A ENVEJECER aporta información de fuentes confiables, siempre recomendamos que consulte primero a su médica o médico de cabecera, y que evite automedicarse.
____________________
Comments are closed.