El tres, dicen, es un número mágico. Pero para el equipo de producción de este programa hoy el número tres significa, antes que nada, agradecimiento. ¿Por qué? Pues porque hace tres años nació Aprender a Envejecer, esta revista dominical dedicada especialmente a las personas adultas mayores. Un grupo etario descuidado por la información distorsionada que por años reprodujo ideas negativas en torno al envejecimiento y a la vejez. Prejuicios que se tradujeron en maltrato, desempleo, enfermedad, miedo y autoabandono. Por fortuna, los avances científicos, los sociales y las nuevas generaciones que llegan a la mayoría vital, han empezado a cambiar el concepto de raíz.
Tenemos un reto enorme en este espacio: ayudar a transformar la imagen negativa de la vejez, sustituirla por una imagen más realista que responda a nuestro siglo, sin olvidarnos de problemas como la pobreza, los servicios de salud, los cuidados y el trabajo remunerado. Este cambio de imagen y paradigma debe de impactar a las mismas personas mayores para que puedan mirarse como sujetos de derechos, como seres que merecen vivir esta etapa de la vida con dignidad y bienestar.
Y aquí entra El Once con su política de inclusión y servicio a todos los sectores, con su intención de crear una programación que sume a todos los grupos de la población. Por ello, ha propuesto este tema en diferentes épocas y ahora nos toca a nosotros el honor de continuar con esa labor. Le invitamos a formar parte de esta propuesta: aprendamos juntos a envejecer a través de la señal de El Once.
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