Recomendaciones para vivir con insuficiencia venosa
¿Qué es la insuficiencia venosa?
Es aquella condición en la que se dificulta la circulación de la sangre a través de las venas de las piernas hacia el corazón, pues “el envío de sangre desde las piernas hasta el corazón se realiza por la contracción de los músculos de la parte superior de las piernas. Cuando existe una insuficiencia venosa las paredes de las venas se debilitan y las válvulas se dañan, provocando que las venas queden llenas de sangre, especialmente al estar de pie”[1].
Los síntomas de este problema pueden ser comezón, hormigueo, várices, hinchazón, pesadez en las piernas, calambres, dolor y úlceras o heridas que tardan en cicatrizar[2]. Es común que, al levantar las piernas o mantenerlas en alto, quienes padecen insuficiencia venosa sientan mejoría.
Ahora bien, para vivir con esta insuficiencia de manera mucho más cómoda, lo recomendable es, según los expertos –además de utilizar unas medias especiales de compresión y seguir el tratamiento médico específico (a veces se sugiere cirugía)[3]– lo siguiente:
“Alejarse del sobrepeso y nutrirse balanceadamente tomando mucha agua; hacer ejercicio, como caminar o hacer bicicleta; masajearse periódicamente las piernas desde el tobillo hasta el muslo; darse duchas de agua fría en las piernas y elevarlas a unos 15 grados cuando se esté recostado en la cama”. Lo ideal también es evitar comida chatarra, lugares calurosos, ropa o zapatos ajustados, así como pasar demasiado tiempo sentado o de pie[4].
NOTA IMPORTANTE: Recuerde que, si bien
APRENDER A ENVEJECER aporta información de fuentes confiables, siempre
recomendamos que consulte primero a su médica o médico de cabecera, y que evite
automedicarse.
[1] https://www.topdoctors.es/diccionario-medico/insuficiencia-venosa
[2] Idem.
[3] https://www.kernpharma.com/es/blog/consejos-para-mejorar-la-insuficiencia-venosa
[4] Idem.
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