La posición de la espalda indica la postura que llevamos en la vida al caminar y al vivir. Muchos dolores, angustias, malos hábitos posturales o malestares acaban por intervenir en nuestro porte de espalda, lo cual, sin duda, repercute en todo el cuerpo, los órganos y la estructura ósea.
Por ello es muy importante no solo tratar de corregir y enderezar la espalda, sino de detectar qué está provocando nuestra mala postura. Una vez hecho esto la solución es relativamente fácil, porque se intenta hacer uno, algunos o todos los ejercicios para mejorarla durante varios días a la semana, si no se puede diariamente.
Por lo pronto, hay varios tipos de ejercicios que recomienda un fisioterapeuta para enderezar la espalda:
Hacer ejercicios de automasaje visceral con pelota, lo cual incide también en la relajación de nuestra respiración; hacer ejercicio para arquear la espalda dorsal baja; reprogramar la espalda con ejercicios cruzados (de pie y brazo); estiramientos isquiotibiales con apoyo en lumbares; apertura de tórax; corrección postural contra la pared; automasaje de pectoral mayor; automasaje de pectoral menor; estiramiento de cadena anterior de los brazos[1].
Cualquiera que sea el ejercicio que la persona profesional en fisioterapia le recomiende, vale la pena hacerlo, ya que la espalda encorvada puede “desalinear el sistema musculoesquelético, desgastar más la columna, causar dolor en cuello-hombros y espalda; afectar la forma correcta del movimiento de las articulaciones, dificultar la digestión o la respiración, así como afectar el equilibrio e incrementar el riesgo de caídas”[2].
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David Martínez
Conductor
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Correo electrónico Sensei David: yagyukan@hotmail.com
Correo electrónico: enmovimiento@aprenderaenvejecer.tv
[1] https://www.youtube.com/watch?v=gn0A2j3PYJs
[2] https://medlineplus.gov/spanish/guidetogoodposture.html
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